El apagón informativo de los medios cómplices
El macrismo y sus socios políticos prometían cambios y ¡vaya si lo consiguieron!. En sólo cien días de gobierno, 110.000 personas fueron despedidas de su trabajo, sea en la administración pública o empresa privada. Son 110 mil familias que quedaron sin el sustento de un trabajo digno.
Se borró de un plumazo al programa Pro.Cre.Ar., el más importante en materia de créditos hipotecarios implementado en el país desde la primera presidencia de Perón.
Se terminó también con Conectar igualdad, ese programa que proveía de una computadora a cada estudiante y docente en el nivel secundario, en todos los establecimientos educativos públicos del país y que se había convertido desde su inicio, en una extraordinaria herramienta de inclusión digital para los jóvenes.
Ya se anunció además el punto final para la Ley de Moratoria Previsional, aquella medida que durante los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner, incluyó a más de tres millones de personas en el sistema jubilatorio argentino.
No terminan con la Asignación Universal por Hijo porque saben que se les incendia el país, pero le siguen mintiendo descaradamente a la gente, como Hernán Lombardi cuando le dijo a la periodista que lo entrevistaba recriminándole la cesión del raiting que hizo la TV Pública a las privadas asignándoles los partidos de fútbol en los que interviene alguno de los equipos considerados grandes, el funcionario no tuvo empacho en afirmar que los partidos eran “para todos” y que además se transmitían por la TDA, cosa que es absolutamente falso ya que el único canal de la TDA que transmite futbol es precisamente la TV Pública, no lo hace “360″ y tampoco “DxT” y eso lo saben perfectamente las 1.300 familias de Salto que durante el gobierno anterior accedieron a la Televisión Digital Abierta y gratuita, y las más de 300 que en las localidades del partido como en Inés Indart, La Invencible y Berdier, lograron el servicio a través de la pantalla satelital.
La TDA, otro programa de inclusión que pronto se irá al demonio, con perdón del demonio por involucrarlo con las medidas de semejante gobierno.
Todas estas cuestiones como muchas otras igualmente anti populares, son minimizadas y hasta invisibilizadas por la prensa nacional, ya que en esa “pluralidad de voces” que tanto pregona el propio Lombardi, no hay espacios para las de Víctor Hugo Morales, Cynthia García, Roberto Caballero, Gustavo Campana, Mariana Moyano y tantos otros que, si quieren trabajar, deben hacerlo en radio emisoras de escasa potencia, que apenas se escuchan en la zona donde tienen ubicada su antena.
