Sociedad

Multitudinaria despedida al Cura Párroco

cura_abel_gasparCon 71 años de edad y 31 como Cura Párroco, el pasado jueves falleció, en su domicilio de calle Fuerte San Antonio Nº 13, el sacerdote Abel Hugo Gaspar, popularmente conocido entre la grey católica como Padre Abel.
El cura fue hallado sin vida minutos después de las 9 horas del jueves 15, en el dormitorio de su hogar, adonde había concurrido una sobrina preocupada por la inasistencia del sacerdote a una reunión programada en el establecimiento educativo que dirigía.
A partir de allí, la infausta noticia corrió como reguero de pólvora causando una profunda conmoción en amplios sectores de la comunidad.
Vecinos y fieles de la Parroquia Ntra. Sra. de Rosario de Pompeya no tardaron en concentrarse en inmediaciones del lugar, adonde rápidamente llegaron autoridades municipales, eclesiásticas y policiales del distrito. También se hicieron presente funcionarios judiciales de la Ayudantía Fiscal local ya que hasta tanto se determinaran las causas del fallecimiento, el hecho era caratulado como “Averiguación causales de muerte”. Esa fue la razón por la que un par de horas más tarde, el domicilio del extinto sacerdote era minuciosamente revisado por personal de Policía Científica de Mercedes y , aunque no se halló signo alguna de violencia ni en la vivienda, ni en el cadáver de Gaspar, igualmente la justicia ordenó la operación de autopsia como pericia determinante para establecer que se estaba frente a un caso de muerte natural, como todo lo hacía presumir hasta el momento y como finalmente quedó demostrado.
Exequias:
Los restos del Padre Abel fueron velados desde las 20 horas del jueves, en Parroquia Ntra Sra. de Pompeya, el mismo templo que él inauguró el 22 de enero de 1984 como Capilla y en el que fuera designado Cura Párroco el 20 de abril de 1985.
Una multitud acompañó los restos del sacerdote durante el velatorio que se prolongó hasta las 10 horas del viernes, cuando el cortejo partió hacia la Escuela que el mismo Cura Abel dirigía, donde se llevó a cabo una Misa de Cuerpo presente, que ofició el obispo de la Diócesis de San Nicolás, monseñor Héctor Cardelli. Cumplida esta ceremonia el cortejo fúnebre trasladó los restos de Abel Gaspar hasta su última morada en el Cementerio Municipal. Allí también, como durante toda las exequias, una multitud despidió a quien en vida fuera Abel Hugo Gaspar, un cura amado por muchos, cuestionado por otros, pero que innegablemente ha dejado huellas imborrables desde su función pastoral, como la misma Parroquia que lo tuvo como Cura a lo largo de 31 años y el Colegio con su Jardín de Infante que, aunque hayan sido financiados desde la Diócesis, nadie ignora que son y fueron obras del Padre Abel. Y esto es lo verdaderamente trascendente para la comunidad, lo demás, las acciones privadas de los hombres, quedan reservadas al juicio de Dios.